top of page
Buscar
  • Foto del escritorYoguinis en Revuelta

¿Hasta cuándo vamos a seguir lastimándonos al practicar Yoga?

Estamos ante un problema real.

¿La práctica de Asanas te puede lastimar?

La respuesta es Sí.

Parece un razonamiento obvio, sólo basta echar un vistazo a instagram para apreciar que las posturas ejecutadas por los profesores y practicantes, lucen cada vez más complejas,(claro que esto es parte de una loca carrera por ganar likes), seria razonable pensar que llevar las articulaciones, ligamentos y tendones a ese rango de movilidad por supuesto que nos va a traer consecuencias a corto o largo plazo.

El problema es que casi no se habla de esas consecuencias, de hecho en el ejercicio comercial de la práctica de asanas todo parece ser beneficio y salud, envueltos en un halo espiritual incuestionable, tanto que los doctores de todas partes recomiendan la practica de yoga a sus pacientes en tratamiento o con lesiones, inclusive hay gente que busca alguna clase para rehabilitarse.

Pero en muchos de los casos se van encontrar un profesor que tiene herramientas muy limitadas como para hacer un tratamiento o cuyo estilo es tan extremo que difícilmente proporcionará el alivio que muchos buscan.

El problema probablemente deriva de cómo ha evolucionado la práctica de asanas las posturas de yoga no fueron ideadas para privilegiar la movilidad, sino para tener un cuerpo apto para la meditación, así nacieron y a la larga se fueron añadiendo más y más posturas, hasta que en el siglo xx se ligó a la práctica con la salud y está se nutrió con las practicas de danza, gimnasia, contorsionismo y acrobacia de occidente, (cabe señalar que en algún punto las prácticas físicas ni lo que entonces se consideraba fakirismo eran bien vistas en India) Este intercambio y adopción de movimientos propiciaron la creación de más y más posturas y más y más estilos; la mayoría de ellos privilegian y promueven la flexibilidad, y la apertura del cuerpo, siendo que se necesita mucho más para mantener unas articulaciones sanas respetando su rango optimo de movilidad y también se necesita fuerza y estabilidad.

Otro problema es que los maestros senior muy rara vez hablan de sus lesiones o de sus operaciones derivadas del estilo de movimiento constante y repetitivo que durante años ejecutaron y que a la larga dejó secuelas. Porque no importa que tan obsesivo seas con la alineación de tus posturas y que ejecutes bien la técnica, si una articulación repite el mismo movimiento de la misma manera todos los días y este la saca de su rango optimo de movilidad, esta va perder coherencia y se va a desgastar, produciendo artrosis o lesiones ¿Y qué pasa con los tendones una vez que se distienden?

Yo misma tuve una lesión crónica después de casi 18 años de practica y enseñanza, una bursítis que en su grado agudo me impedía caminar. La respuesta de mis maestros a mi dolor muchas veces era “Práctica más” Huelga decir que esa no fue mi solución.

Una de las pocas maestras que han compartido abiertamente su experiencia es Diane Bruni quien sufrió una lesión muy dolorosa de cadera que le hizo replantearse todo el sentido de su práctica, aquí la pueden ver:

Personalmente pienso que abrir esa información a los estudiantes seria muy valioso, pues sería parteaguas para discutir la efectividad del método y sus consecuencias a la larga. ¿Se imaginan lo rico que sería?

Cada vez más maestros en el mundo se están planteando estos problemas y muchos han alimentado sus enseñanzas añadiendo otros estilos de movimiento más orgánicos, funcionales o eficientes, haciendo mezclas interdisciplinarias, y dando una carga muy importante a la enseñanza de anatomía y biomecánica lo cuál ha abierto el debate de si eso que hacen sigue siendo Yoga ( pero eso será tema de otro post).

Ahora que la mayoría estamos encerrados y que la enseñanza a distancia se ha vuelto una necesidad, mucha gente esta probando el yoga por primera vez, mediante videos. Sería muy bueno tocar con nuestra propia vulnerabilidad para recibir a aquellos que comienzan desde un lugar más honesto y empático, para evitarles las lesiones que nosotros hemos sufrido. (Por ejemplo invitándolos a hacer 108 saludos al sol, sin tener el entrenamiento adecuado).

Reconocer nuestras propias lesiones y limites en nuestros cuerpos es también poder ver al otro y alimentar nuestra empatía.

¿Cómo ha sido su experiencia?

¡Antes de que se me olvide!

Por favor absténganse de:

1: Querer explicarme mi propia publicación.

2: Explicarme qué es el verdadero Yoga, es muy claro que estamos hablando de las posturas.

¡Ahora si!

Dejen sus comentarios, amigos.

Gina González.

Los leo.



174 visualizaciones0 comentarios

Entradas recientes

Ver todo
Publicar: Blog2_Post
bottom of page