(¿Y dónde trabajarán los yoguis?)
La actual crisis mundial del Covid-19 ha venido a sacudirnos de muchas maneras, poco a poco se ha trastocado nuestra cotidianidad y como un mar revuelto ha venido a destapar cosas y a arrojar basura sobre la playa.
La industria del yoga se ha visto muy afectada en este proceso. ¿Podrán los pequeños y medianos estudios sobrevivir a esta gran pausa? Y los estudios que sobrevivan ¿Podrán sostenerse con las medidas de distanciamiento de la nueva normalidad y operando al 30% de su capacidad?
Nos esperan muchos cambios aun y readaptaciones. Muchos (escuelas y profesores) han optado por lanzarse al mercado online, la mayoría de las veces ofreciendo sus clases de manera gratuita, lo cual sabemos no es sostenible por mucho tiempo. La oferta hoy en día es abrumadora.
Cientos de certificaciones al año con los mínimos estándares de calidad académica han contribuido a este panorama tan desolador. Con gran sorpresa veo como la oferta de certificaciones no se ha detenido (ahora son en línea) y me pregunto ¿En donde van a trabajar estos nuevos maestros certificados? ¿Qué harán con sus radiantes certificados de Yoga Alliance (o cualquier otra figura) una vez concluido el curso? Sobre todo aquellos que se quieren convertir en maestros. Me queda claro que quienes ya los son, tendrán que actualizarse o diversificarse para poder distinguirse.
Por otro lado las Alianzas, Federaciones, Institutos etc. No se han pronunciado de ninguna forma en apoyo a los profesores registrados. Reafirmando que son solo entidades recaudatorias y que el registro no sirve de mucho, sólo para poner un sello que indica cuantas horas de entrenamiento has tomado.
En mi siguiente publicación ahondaré más en este asunto.
Esta crisis nos viene a confrontar con la precaria situación laboral de la enseñanza del yoga, sin un seguro, sin ahorros, sin garantías, sin apoyos y viviendo al día, en un mar de sobre oferta.
El mundo ya cambió, también el panorama del yoga.
Veamos qué otras cosas sigue arrojando este mar revuelto.
Gina González.
